domingo, 28 de abril de 2013

Mi abuela bebía el te a las 5 pm y era santiaguina. Le gustaba beberlo a la hora en que la ciudad ardía con mayor vigor porque, según ella, luego, con el sudor, venía un fresco que, en contraste, resultaba muy agradable. Parecía, entonces, que era necesario realizar este rito de contrarios, pasar de un calor sofocante a un frescor dulce. Silvia Carrasco vivía en la cocina de su casa. Allí tomaba el té a las 5 pm esperando la campana del camión del gas que solía tañir 10 minutos después. A mi tata le gustaba anunciarse así, mezclando el campanazo con el grito de "gaaaascooo". A ella le gustaba recibirlo con un tazón de té samba y cedrón en lugar de un abrazo.
Mi madre me tuvo a sus 18 años. Era una bebedora de té igual que mi abuela. Por eso no fue raro que decidiese alimentarme mis tres primeros días con esa bebida. Mi tata, al llegar a casa, me dio leche.
Anoche, después de intentar terminar de corregir unas 200 evaluaciones de libros, mi madre me visitó sobre la medianoche. Traía en sus manos dos bolsitas de té y me dijo, a modo de secreto, "es del que toma el presidente" y yo le sonreí respondiendo "¿le ponemos un poco de cedrón? Seguro él no lo toma así como la abuela...". Al irse, descubrí en un vaso su bolsa de te. Aún tiene esa costumbre de guardarlo para que de otra taza. Ella es de Conchalí.

jueves, 25 de abril de 2013

Ejercicio 12: La corona de espinas

La encrucijada deteniéndose a los pies de ese telón rocoso, imponiéndose en un primer plano incómodo por audaz, violento e ineludible, como la amenaza sostenida con firmeza por la mano, inadvertida tras los cuerpos de aquéllos...los resignados a su látigo.
Allí está ella, la coronada de montañas. Allí están ellos.
Allí está ella, la resuelta hasta el escándalo, la de la mano, castigadora, la del látigo, la Amada.
Allí están ellos...
¿Quién resultaría herido por la mano/Amada? ¿EL escogido o el ignorado? ¿Cuál herida rasgaría la carne...cuál volvería jirones el cuerpo...la vida? ¿Quién sería el coronado por espinas?
En la dirección de las miradas de dos de las figuras podría adivinarse el horizonte común, un horizonte inscrito en los márgenes de un modo heredado: el de la compañía. La otra figura, paria del mundo, ajeno y resuelto como si conociera su destino desde la mano, observa la esquina de la soledad, habita, en libertad, su rincón de mundo. Nada de horizontes comunes para él. Ni a fuerza de latigazos querría acarrear el peso de ella. Como indómito que se es, desdeña el yugo. No transará libertad por compañía. Apenas sabe movilizar el peso de su cuerpo. Nada sabe de docilizarlo, exponer su cabeza a la guillotina amorosa, mostrarse postrado a los caprichos de la mano. Llegó al mundo con la vida echa jirones. Lo leyó en las líneas de su mano desde el nacimiento. Llegó al mundo con el corazón coronado de espinas.
Pero ella aún cree, elevándose desde ese pedestal/carreta, que puede optar por él, que su amor en forma de látigo puede herirle el cuerpo de caricias, flagelarle los latidos hasta la sumisión, coronarle la existencia de espinas.

viernes, 19 de abril de 2013

Soja

Luego te envío la receta
cuando logre quitarme el rouge de la boca
y el placer de la mano

jueves, 18 de abril de 2013

Ejercicio 11: Eslabón

El dorado/el suena
el metal/dorado/suena
frío
entre las manos se despliega metálico
se pliega (a)la mano se acurruca
metálico el
suena/la mano dorada
se despliega en la cadena
se pliega el guante
metálico
frío
la mano se escurre por la cadena
liberada del guante
suena liberada
desplegada
cae
pesada de eslabones atados a la memoria
inanimada corona
la cabeza desnuda
desgajada de recuerdos
las líneas de la mano dorada
trazadas en otro tiempo.

lunes, 15 de abril de 2013

A Elisa Bindhoff





El menor rescate.
Al país de Elisa.
Tú que roes las hojas más fragantes del planeta
Chile
Eres la oruga de la mariposa luna
Tú cuya estructura total desposa
la tierna cicatriz de la ruptura de la luna con la tierra
Chile de las nieves
Como la sábana de una hermosa mujer arroja al levantarse
He descubierto en un relámpago
Lo que eternamente a ti me predestina
Chile
Por esa luna de la séptima morada de mi tema astral
La Venus del Sur veo
naciente no ya de la espuma del mar
Sino allá en Chuquicamata de un chorro de azurita
Chile
Con aretes araucanos en pozos de luna
Tú que a las mujeres brindas los ojos de bruma más hermosos
Tocados con la pluma de un cóndor
Chile
Nada hay mejor que decir de la mirada andina
Afina el órgano de mi corazón con la estridencia de los
esbeltos veleros de estalactitas
del Cabo de Hornos
Chile
De pie sobre un espejo
Y devuélveme lo que sólo ella posee
Un ramo de mimosa que aún en el ámbar se estremece
Chile de los cateadores
País de mis amores.
(André Breton, 1946)

Constelación Surrealista


jueves, 11 de abril de 2013

Ejercicio 10: la mujer que aprendió a sujetar los pájaros en el aire y perdió la alas

La templanza de la mano se te va agotando
la mano, eliza, la palabra se te declara en quiebra se te
quebró la lengua, bonita, en mitad del texto y estrujas
pero no pares y estrujas y para qué pero
escribes con la mano quebrada/ la misma que cortas y
lloras y para qué si hay tanto mar afuera y
sólo la ventana entre tú y el llanto

que no es el tinto, mujer, que no es la lengua, mujer,
que no eras tú perdido
en las líneas de mi mano/ como siempre
me recorriste con la venda en el corazón, gallinita ciega.




Maya

Meshes of the afternoon, Maya Deren.

martes, 9 de abril de 2013

Radio Horizonte

El día se dispara en un accidente
deletreando TIEMPO que
escasea accidentado de
actividades
un disparo el día un dispar
ate
NO
en la mano una cascada relojea
minutosysegundos al
son de la radio Horizonte
perdido
103.3
descompuesto en el dial
Horizonte mudo
no sabía que podía comprarse
el Horizonte transarse
por pesos atardeciendo en el dial
anochecido
pero NO estrellado según
la antena se vende la
página se vende los
se vende el
tiempo es un escándalo es
tiempo
un reloj colgando pies arriba es
ta todo patas arriba por estos mis lados
colgado el
Dalí no es nada su tiempo
no es nada, querido,
baILA bAILA BAILA!

miércoles, 3 de abril de 2013

Ejercicio 9*



...
Tejí o
Soñé un telar de piedra. Mis palillos podían transformar la piedra en barro, el barro en realidad y la realidad en piedra
telaba
...
Y tejí rostros atrapados detrás de un cristal y agua. Pero mis palillos mutaban el cristal y el agua en rostros
y rostros
...
Se trenzaban en luchas milénicas, un palillo contra el otro, uno con el agua y el otro con la piedra, pero yo con los rostros
milénica
infinita hasta el letargo
otra
...
Soñé tus rostros pegados al cristal.
El rostro de mi madre se tornaba de piel a sal. Pero le tejía un rostro de piedra
a la piel.
...
En el sueño tejí un árbol de picaflores en celo que se volvían flores y caían al suelo en pétalos blancos, pero con alas
que decían "me quierenomequieremuchopoquitonada"
...
Soñé tu rostro en la plaza 2 de mayo, en las escaleras de la plaza, diciéndome que ya no me querías más. Entonces, te tejí un "tequiero" a la boca, un "tequiero" con el palillo de piedra, un "tequiero" bordado a tu rostro, escrito con piedritas a la boca, para que no se te olvide.
...
El palillo de agua tallaba en el telar el rostro de un niño de arcilla, tan cambiable que asustaba. Lo transformaba en piedra como tu "tequiero".
...
Soñé  que golpeaban a la puerta y que no eras tú ni él. Dentro de la habitación había alguien que no era yo esperándolos,  sosteniendo un libro en llamas, con el futuro tatuado en los ojos.
...
Soñé que me volvía árbol y que caía al suelo lleno de alas
blanco.
...
Soñé que el palillo de piedra me atravesaba la boca, mientras el palillo de agua me esculpía una sonrisa

en el pecho de flores preñado
de pájaros.


* A partir de Bolaño